24 de febrero. Mi Banda Sonora.

impressions

Nicolás ha dormido hoy unas dos horas con nosotros, en nuestra cama. Es la primera vez que lo hace, que lo hacemos. No sé si su presencia ha podido tener que ver en que me haya levantado tarareando la canción «Carrie» de Rusos Blancos.

Día de alertas. Por lluvia, viento y fenómenos meteorológicos propios del invierno. Alerta por invierno. Ante dichas condiciones, hemos retrasado nuestra salida de casa y he puesto el LP de Pic-Nic, el grupo de Jeanette. Me maravilla este disco aunque la lógica (hiper)actividad del pequeño impide que lo haya disfrutado en ese momento como se merece.

Me encanta ir a tomar el café al Síkera. Un bar cálido en su decoración, en el que siempre encuentro el periódico libre y una mesa apartada en la que cabemos perfectamente el carro de Nicolás y yo. Un bar con un amplio catálogo de vinos y una buena barra de pintxos. Un bar que a Holden Caulfield le parece un tanto burgués. Al menos, algo así me insinuó una vez en una conversación en la que llegamos a establecer una suerte de relación entre bares y estrato social. ¿Soy menos obrero por ir al Síkera? Dudas de clase (trabajadora) que espero exponer próximamente en un post.

Que me gusta el Síkera, decía. Además, ponen un taquito de tortilla de patata gratis con el café. Una tortilla – como el resto de pintxos y el menú del restaurante – cocinada, obviamente, por el cocinero. Un simpático tipo que tiene ubicado su lugar de trabajo junto a mi mesa. Un tipo que siempre saluda y que hoy se ha dirigido a Nicolás por su nombre, por su diminutivo. Por Nico. Es un tipo que, además de ser el responsable gastronómico del garito, también se encarga del aspecto musical. Y, en este sentido, también tiene muy buen gusto. Y ese buen gusto es otro de los factores por los que me gusta ir al Síkera. Me gusta el Síkera. Mucho soul: Al Green, Ray Charles, Stevie Wonder. En homenaje al cocinero del Síkera, cuando hemos vuelto a casa hemos puesto el disco «This is my country» de los Impressions, posiblemente mi conjunto favorito del estilo. Nicolás ha estado más entretenido con otras cosas y, por lo tanto, no ha estado pendiente de apagar el equipo o tirar el plato y, así, me ha dejado disfrutarlo. Tanto lo he hecho que lo hemos puesto dos veces.

A la tarde he recibido un correo que informaba que el próximo 6 de marzo sale a la venta el nuevo disco de La Bien Querida. Dicha noticia me ha servido para recordar que su anterior trabajo me pareció interesante y con el fin de corroborarlo (o no) me he puesto ese «Ceremonia» en Spotify. Y sí, no está mal. Pero hasta ahí.

Y esta ha sido la banda sonora de mi 24 de febrero de 2015.

17 y 18 de enero. Mi banda sonora.

Ayer fue mi cumpleaños. Los fastos derivados del mismo hicieron que se me pasase escribir esta pretensión de diario con la música como hilo conductor del mismo. Lo arreglamos haciendo una doble.

Sonaron discos ya que me regalaron unos cuantos. Por ejemplo, «E for Edward» de The Times y «Sunbathing Animal» de Parquet Courts. Además de estos, cayeron el «Atlas» de Real State, «The People who grinned themselves to death» de los House Martins (éste habrá que cambiarlo por otro ya que ya lo tenía), dos singles (la reedición del «Himno Generacional #83″ de Los Planetas» y «Where is the Love» de Betty Wright, éste regalado por el capo de La Casa de Atrás, Carlos – los otros, por Ana y otros autoregalados – ) y una caja de tres CD que recrea la mítica cinta C86 de la NME junto a otros no sé cuántos temas en esa onda.

El resto del cumple consistió en pasear, comer de maravilla en La Viña del Ensanche y disfrutar de Ana y Nicolás.

Hoy han sido otros amigos los que han hecho los años. Entre ellos, Javi, gestor de uno de los mejores bares del mundo, el Panorama, en Barakaldo. Para felicitarle le he puesto en su muro de Facebook un tema que le suelo pedir en el bar o que, directamente, él pincha, «Can’t satisfy» de los Impressions. Al ponerlo en YouTube, he visto que Nicolás ha sonreído y ha querido bailarlo lo que me ha llevado a poner el single en casa y luego el LP «Keep on pushing» de la citada banda.

Y ésta ha sido la banda sonora de los días 17 y 18 de enero de 2015.