Mi cosecha de 2015. Las pelis.

No, no es una inocentada. Hoy, 28 de diciembre, retomo mi actividad cienfebrista. La ya tradicional actividad de repasar el año analizando, en este caso, las categorías que componen este espacio, me ha empujado a sentarme a ello. Puede que una vez acabe con esto de los listados, vuelva al enclaustramiento que ha caracterizado el blog en estos últimos tiempos. O, siendo positivos, puede que vuelva a coger carrerilla. O, siendo negativos, puede que ni acabe con esto de la Cosecha 2015. Veremos.

Dos cosas más antes de meternos en harina: otra de las grandes motivaciones que ha provocado que ahora tú estés leyendo esto es un mensaje de un amigo de hace una semana o así preguntándome a ver qué pasaba con las Cien Fiebres. Que alguien se haya sentido inquieto ante mi inactividad bloguil he de reconocer que me ha gustado y, como digo, me ha servido de combustible para estar ahora dándole a la tecla. Para ti que, entiendo, leerás esto, merci beacoup, monsieur.

La segunda gran razón ya tiene que ver, directamente, con el primer objeto de análisis de esta primera entrada relativa a mi Cosecha 2015: las pelis. Y es que anoche mismo pude disfrutar de un film que me gustó tanto que, en cierta forma, también me ha obligado a sentarme delante del ordenador.

Por ello, empiezo por un listado de las películas que he visto durante este año que se nos va a sabiendas de que va a ser el post más light, el más corto y al que menos tiempo he de dedicarle porque, nuevamente, el cine es la disciplina a la que menos atención he prestado en estos doce meses. Y es que como todo buen propósito que uno se plantea a principios de año, lo suyo es no cumplirlo y si el mío del año pasado era ver más cine, pues eso, que no, que no lo he cumplido y, nuevamente, han sido ocho las cintas visionadas. Bueno, podíamos subirlo hasta diez teniendo en cuenta que uno de los títulos que reseñaré corresponde a una trilogía pero dejémoslo ahí que me hace gracia la coincidencia. Y sí, este 2016 volveremos a plantearnos superar ese número. Y antes de pasar a hacer el listado, recordar a nuestra audiencia que la gran mayoría de los Films que he visto en 2015 no han sido producidas este año y que, quién sabe, a lo mejor he visto alguna más que me he dejado en el tintero pero si no aparece aquí es porque fue absolutamente insignificante para bien o para mal y, por lo tanto, no merecen la pena.

Al lío… Mi cosecha 2015 cinematográfica…

BOYHOOD (Richard Linklater, 2014): de la nada, todo. De lo común, lo extraordinario. Artefacto al que acudía con muchas reservas y al que, finalmente, acabé sucumbiendo. Una de las mejores que he visto este año, sin duda. *****

LA CAZA (Thomas Vinterberg, 2012): inquietante, incómoda, magnífica. De las que remueven y provocan la reflexión, como profesional, padre y persona. ¿Un pero? Algunos fallos técnicos detectados por mi perfil laboral que, supongo, a mucha gente habrán pasado desapercibidos. ****

LA ISLA MÍNIMA (Alberto Rodríguez, 2014): cine negro con trasfondo socio político que quiero volver a catar varias veces. Acabé de verla con la sensación de “así, sí, joder”. Magnífica. ****1/2.

TRILOGÍA “BEFORE” (ANTES DEL AMANECER, ATARDECER Y ANOCHECER) (Richard Linklater, 1995, 2004 y 2013): acudí a esta trilogía enfebrecido por haber disfrutado cual gorrino en un maizal con Boyhood, dirigida también por Linklater. Asimismo, todos mis referentes cinéfilos alababan sobremanera los tres Films… Y sí pero no. Admito sus escenarios, su fotografía, sus diálogos y la arriesgada apuesta de fundamentarlas, básicamente, con dos personajes y tal pero, la verdad, me aburrieron bastante y llegué a quedarme dormido en varios pasajes de las tres. Me pillarían cansado o algo. **

CAMARÓN (Jaime Chávarri, 2005): me costó acabar de verla porque el personaje me atraía y tal pero, uf, se me hizo muuuuuuuy larga. Floja. *

LOREAK (José Mª Goenaga, Jon Garaño, 2014): preciosa, especial, psicológica y original forma de tejer relaciones interpersonales, de hablar de ¿amor? y de narrar mucho del interior de las personas. Un peliculón que tengo que volver a ver en versión original porque, la verdad, el doblaje al castellano es muy chusco. Un peliculón. ****1/2

VIRIDIANA (Luis Buñuel, 1961): no sé qué noticia, meme, GIF, gag o qué me llevó a verla de nuevo. Da igual. Bienvenida sea siempre. Me parece fantástico revisar una vez al año o así la, para mí, mejor película de la filmografía de Luis Buñuel (aunque tampoco he visto todas) Como se dice ahora, un must siempre. *****

INSIDE OUT (Pete Docter, Ronnie del Carmen, 2015): esta ha sido la gran culpable que señalaba en la introducción. Esta ha sido la única película que he visto de 2015 en las postrimerías de 2015. Y menos mal que lo he hecho. Maravillosa. Amena, inteligente, divertida, emocionante e híper didáctica. Me parece francamente difícil explicar algo tan complicado de una forma tan sencilla. Sublime. *****

PD: la imagen procede de mis Paredes que Hablan.