Semanas convulsas en territorio gualdinegro. Que ya lo sabréis, pero como no publicaba el Acta del Lunes desde el 4 de enero, pues os hago un microresumen: se quitó a Larrazabal como entrenador y se le mantuvo como director deportivo; le sustituyó Germán Beltrán y a este le han dejado como míster tres partidos (dos derrotas contra dos claros aspirantes al ascenso – Bilbao Athletic y Sanse – y un empate frente al Leioa), tras los cuales, se decide botarle y le sustituye Jabi Luaces, que debutó en el banquillo de Lasesarre este pasado sábado. Un cambio que no se ha vivido demasiado bien entre la masa social gualdinegra y que coincide con la buena noticia de que se sale del proceso concursal, lo cual puede llevar a barruntar en que puede haber acuerdo ya con grupo que se va a hacer con las riendas económicas del Baraka y que éste ha decidido ese cambio deportivo. Eso especulando y sin desdeñar otro tipo de opciones.Como decía, a la nefasta temporada en lo deportivo, se une el sainete en forma de baile en el banquillo, el mosqueo de parte de la afición, el mosqueo por parte del míster saliente y la sensación de que esto acaba como el Rosario de la Aurora, un culmen que se podría ubicar desde hace ya mucho tiempo, por otra parte.
Y he aquí que llega el nuevo míster y, con cuatro días en el cargo, debuta con un 3-0, a uno de los gallos del grupo y jugando además muy estilo Baraka Old School, esto es apretando, mordiendo, con intensidad, etc… y entonces emerge la bipolaridad de todo buen gualdinegro que se precie y si unos días antes todo era un desastre, ahora se piensa, poco menos, que en ascender de categoría y en empezar a diseñar un equipo que en tres años esté jugando en Europa. Nada como que la pelotita entre en la portería para que cambien las percepciones. Pura vida.
En fin, permitidme la boutade y, volviendo a la tierra y usando el símil sanitario que el presidente de la junta rectora ha empleado para describir la situación económica del clubdentrodepocoSAD, seguimos en coma pero parece que hemos respondido a un estímulo, hemos movido el meñique y, por tanto, quizá podamos permitirnos creer en la salvación. Veremos cómo evoluciona el enfermo. De momento, este miércoles otro matchball frente al Laredo. Ay. Apelaremos al Keep the Faith.
También apelaremos a ello pensando en clave red. Vaya rachita. La última derrota, contra el Leicester, después de la delicatessen de Firminho-Salah, no sé por qué, me escoció. Esta semana viene la champions e igual alivia ese escozor. Aún así, a las duras y a las maduras. Así lo entienden algunos hinchas scousers que ayer mostraron su apoyo en Anfield con las pancartas de las fotos de aquí debajo. Entre o no entre la pelotita. Supongo que también otro tipo de pura vida, al menos mientras la gente siga acordándose del legado Klopp en los últimos años. Ay.
Ay, ese Keep the Faith, ese lema northernsoulero (si me permitís, aquí un enlace a mis Cienfiebres Musicales en un episodio dedicado a este subgénero) del que robamos logo y eslogan para reivindicar el fútbol norteño. Ese fútbol norteño tan bien representado en una imagen (la que encabeza estos párrafos) que bien podría presentarnos a un aficionado a esos sonidos negroides, volviendo de empalmada del club y durmiéndola sobre los vetustos tablones de madera que conforman la tribuna del estadio de su equipo, aletargado ante el espectáculo de gorrazos que le están brindando. Ay. Pura vida que echamos de menos los que gustamos de ir al fútbol en directo (y, de vez en cuando, también tras una noche de farra)… nos tendremos que seguir conformando con la tele y con estos desahogos absurdos. Ay.
* el muchacho de la foto descansa en la tribuna del estadio del Cardiff City, circa 1975. La compartí en Northern Football en octubre del pasado año.