Lo que viene siendo una inmersión en toda regla a la cotidianidad o rutina a la que me refería en mi anterior post. Semana ardua esta que acaba. Al niño y al curro, añadamos:
– Universidad. Sí. He vuelto. Como McArthur. Por capricho y sin pisar aún el aula, sí, pero ya hay un come-come que ronda diariamente diciéndome «vete a hablar con los profesores», «aparece por clase», «intenta conocer a algún chaval o chavala que te vaya pasando apuntes». Etcétera.
– BAFF. Una liada de esas a las que no sé decir que no que me propone David. No sé decir que no y me gusta pero ahí me ha tenido (y me tiene) pendiente. Llegado el momento (si llega), claro, ya les explicaré qué significan esas siglas.
– IMAGO. Este ha sido el lío padre. Derivado de EducaBlog y con objetivos a corto plazo en parte del mismo. Vaya tralla. En fin, espero, deseo y confío que merezca la pena. Creo que sí. Ya se les informará a su debido tiempo.
– Una frase: «(…) han entrado en una espiral sinsentido -ellos solos y entre ellos mismos- y me temo que…». Una información que llega de imprevisto y trastoca futuros y atractivos planes para los que hay buscar, con premura, una alternativa.
Dejemos de lado el concierto de Vetiver del pasado jueves al que no pude asistir; o que no he renovado aún mi carné del Barakaldo (mañana le ponemos remedio); o que estoy leyendo una novela de Pinilla («Sólo un muerto más») exclusivamente en el metro… Yo qué sé…
Lloremos en esta especie de egorecopilatorio febril y anticipemos futuros proyectos que ahora pesan pero de los que ya tendré tiempo de sacar pecho y de presentar a bombo y platillo a pesar de la imagen elegida para ilustrar estas letras. A inventar la segunda parte. Sarna con gusto y eso.
Pasen buen fin de semana.
¿Al final qué ponía en la página siguiente? Mi teoría es que a casi cualquier párrafo, si lo aislas, puedes sacarle un significado profundo. Ya sabes, a modo de test Rorschach.
Pingback: 20 de noviembre. Mi Banda Sonora. | 100 Fiebres