Hoy he acabado una libreta. Es una Moleskine negra que me regaló Ana hará cosa de un par de años o así y que ya se ha llenado con anotaciones de lo más variopintas; desde productos para la compra pasando por apuntes del curro o de EducaBlog y llegando a títulos de libros o discos a adquirir. De vez en cuando, alguna idea, puntuales reflexiones o citas cazadas a vuelapluma. De esta última categoría (con etiqueta propia en este blog, todo sea dicho de paso), se nutre el grueso de este post.
Así, tras revisar la libreta entera para tratar de salvar algo que tenga continuidad en el recién estrenado bloc, me encuentro con una serie de notas que me retrotraen a un, llamémoslo, trabajo para un proyecto que pudo ser, aún es y puede que llegue a ser aunque, a día de hoy, esté en coma. Os dejo con ellas. No me extenderé más. Para el 99% de los que podáis leer esto, las siguientes frases y palabras no tendrán ningún sentido. Para cuatro personas concretas, sí. Buenas tardes.
«Si te vas, te dejo de hablar».
«¿Vosotros vais a ser los cronistas de mi época?»
«Cuando abandonó el marxismo, le marcaron con una equis».
«Yo, tres niñas y una escopeta».
«Una grapadora Wolfcraft».
* La imagen que acompaña esta entrada es uno de los resultados que da Google al buscar «grapadora Wolcraft».